Tres intensas borrascas después, y temiendo tener que anularla a causa de las mismas, finalmente, el pasado sábado 3 de marzo pudimos inaugurar la actividad de senderismo propuesta por nuestro AMPA. Y no pudimos haber deseado un mejor comienzo. No solo disfrutamos del buen tiempo, sin una gota de lluvia durante la totalidad del recorrido, pero con abundante agua corriendo por los barranquillos y atarjeas cercanas, sino que además algunos almendreros (pues ya sabemos cómo se dice "correctamente") conservaron parte de sus coloridas flores para darnos la bienvenida.
Un día muy especial para todos nosotr@s, pero también estamos seguros que lo fue para todos aquellos (casi setenta valientes), que decidieron acompañarnos a recorrer (y conocer) uno de los paisajes agrarios más hermosos que puede deparar la isla de Tenerife. Un paisaje no únicamente espectacular por lo natural del entorno, sino en el que también se aprecia cómo la mano del hombre ha ido dando forma al mismo, a base bancales, muros de piedra secas, eras y, como no, almendreros.
Nos trasladamos a Santiago del Teide a recorrer una variante de la "ruta del almendro en flor", adaptada para todas las edades. Contamos con la asistencia de niños desde cuatro y cinco años, pero también de otros tantos cursando actualmente primaria y secundaria, además de padres, madres, abuelos y abuelas, otros familiares y hasta personal del centro. Un animoso y animado grupo en el que todos y cada uno se comportó como un excelente senderista. Respetamos el entorno, disfrutamos de las vistas, atendimos a nuestro experto particular del cultivo del almendrero, pero sobre todo, nos comportamos como auténticos senderistas en aquella máxima principal que debe motivar a quien emprende un camino. Porque lo importante no es terminarlo, sino disfrutarlo mientras dure.
A tod@s los que vinieron, les queremos dar las gracias, y a los demás, decirles que les esperamos para la próxima.